miércoles, 16 de enero de 2008

La política es mejor que el sexo

Pedí permiso hace tiempo para colgar ésto por aquí. El autor es un genio posmoderno al que le pone leer The Economist de manera intermitente. También es especial. Brilla para mi. Y para todos.
Barack Obama Jr. Y es que aparte de ser mulato, tener una sonrisa preciosa, haberse opuesto a la guerra de Irak cuando era un mindundi, escribir biografías superventas no aptas para diabéticos de puro empalagosas y meapilas, y decir muchas veces las palabras "cambio" y "no creo en una america blanca y en una america negra, creo en los estados unidos de America" se desconocen otros meritos y propuestas del ciudadano O.

Un señor de ficción que, eso sí, resuelve mejor que nadie la imperiosa necesidad de una América más fea de lo que está dispuesta a admitir de seguirse retrotrayendo rumbo a unos años sesenta gloriosos en los que el bienestar del "new deal" se conjubaban con los deseos de libertad y emancipación de una sociedad inocente... Así es Obama: un caramelo sin azucar para "baby boomers" nostálgicos y fans de "Forrest Gump". Mucho más agradecido que votar a una odiosa señora fálica, preparada, que mira a la realidad de frente, uniformada de traje sastre y perlas que va con una cartera de asuntos urgentes encima de la mesa.

Gracias Santi.

1 comentario:

alejandro dijo...

Me gustó su artículo y me hace pensar, como complemento a usted, que el sexo es mejor que la política.