Si acertara Ursula K. Le Guin al definir la ciencia ficción como la literatura que emplea el futuro como metáfora, y si acertara William Gibson al decir que el futuro ya está aquí, se podría concluir que la viabilidad de la ciencia ficción efectivamente ha terminado. Para que una metáfora funcione ha de haber distancia entre los términos que se conectan. A un presente que también es futuro, éste no le sirve de espejo.
Para crear el desconcierto, el asombro y el desplazamiento imaginativo que proporcionaba situarse en el mañana, los autores tendrían que echarle un buen vistazo a la realidad dislocada del hoy. Dada la aceleración tecnológica que es la realidad en que se opera, no se halla motivo para imaginar futuros que habrán de quedarse de inmediato obsoletos en tanto que se hagan realidades presentes.
Antonio Córdoba firma para ADN.es este interesante artículo sobre el futuro de la ciencia ficción, aunque si me dan a elegir, yo me quedo con este otro que ya escribiera tiempo ha, en otro lugar virtual, titulado El futuro como metáfora. Estos dos artículos contrastan con el reportaje de Babelia titulado Una galaxia que se apaga y el análisis La ciencia ya no es ficción. Pinchen, comparen y cuéntenme cosas en los comentarios, ;)
1 comentario:
El problema no es que se utilize el futuro como metafora - idea que por ciertono es original de la Leguin- sino que se emplean imagenes extraidas del acervo cientifico como metafora que no es exactamente lo mismo. En este sentido la ciencia actual sigue dando las mismas posibilidades (R.e.:Kim Stanley Robinson) el problema es el talento para codificarlos. Y William Gibson no tenia razón. Lo del futuro ya esta aqui- es una idea bastante más antigua- y los libros de Gibson se han quedado ligeramente anticuados. En realidad sus referencias a la moda de entonces - mohicanos y pantalones de cuero- han envejecido bastante mal.
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